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María Jesús Suárez Duque – Doctoralia.es
¿Es mejor aguantar por estabilidad o afrontar una ruptura?
Psicóloga online especializada en Rupturas de pareja
Muchas personas llegan a consulta con una duda que les acompaña desde hace tiempo:
“No soy feliz, pero estoy estable.”
“No estamos bien, pero tampoco estamos tan mal.”
“¿Y si aguanto un poco más por seguridad, por los hijos, por no empezar de cero?”
Esta pregunta no suele aparecer en relaciones claramente conflictivas, sino en aquellas donde no hay grandes dramas, pero tampoco hay conexión, ilusión o bienestar emocional.
Y eso, precisamente, es lo que más cuesta sostener.
¿Qué significa “aguantar por estabilidad”?
Aguantar por estabilidad no siempre implica una relación mala. A veces significa:
- convivencia funcional
- ausencia de grandes discusiones
- rutina predecible
- seguridad económica o familiar
- miedo a perder lo construido
Desde fuera, estas relaciones pueden parecer “normales”.
Desde dentro, muchas personas sienten vacío, desgaste o desconexión emocional.
¿Por qué cuesta tanto plantearse una ruptura en estos casos?
Porque no hay un motivo “suficientemente grave” que la justifique.
No hay infidelidades, violencia ni grandes conflictos. Y entonces aparece la culpa:
- “No debería quejarme”
- “Hay cosas peores”
- “¿Quién soy yo para romper esto?”
Pero el malestar emocional sostenido también es un motivo válido, aunque no sea visible.
Estabilidad no siempre es bienestar
Una relación puede ser estable y, aun así:
- limitar tu crecimiento personal
- apagar tu deseo
- generar tristeza silenciosa
- hacerte sentir solo/a estando acompañado/a
La estabilidad externa no compensa siempre la inestabilidad interna que se genera cuando uno vive desconectado de lo que siente.
¿Qué precio tiene aguantar demasiado tiempo?
Aguantar durante años por estabilidad suele tener consecuencias:
- resentimiento acumulado
- apatía emocional
- distanciamiento afectivo
- sensación de haber perdido tiempo vital
- dificultad para tomar decisiones más adelante
Muchas personas no se arrepienten de separarse, sino de no haberse escuchado antes.
¿Y qué pasa con el miedo a equivocarse?
El miedo a arrepentirse es uno de los mayores bloqueos:
“¿Y si dejo algo bueno y luego me doy cuenta de que era suficiente?”
Esta duda no siempre indica que debas quedarte, sino que estás tomando conciencia de una decisión importante.
No existe la decisión sin riesgo. Pero sí existen decisiones más coherentes contigo.
¿Cuándo afrontar una ruptura puede ser más sano?
Afrontar una ruptura puede ser una opción saludable cuando:
- llevas tiempo sintiéndote desconectado/a
- ya no te reconoces en la relación
- te quedas más por miedo que por deseo
- imaginas el futuro y no te ilusiona
- sientes alivio al pensar en estar solo/a
Separarse no siempre es huir. A veces es dejar de traicionarse.
¿Y cuándo tiene sentido intentar sostener la relación?
Puede tener sentido quedarse cuando:
- existe deseo real de ambos por trabajar la relación
- hay comunicación y responsabilidad compartida
- el malestar es puntual y no estructural
- no te quedas solo por miedo o dependencia
La clave no es aguantar, sino elegir conscientemente.
La pregunta importante no es “¿aguanto o me voy?”
La pregunta más honesta suele ser:
“¿Qué parte de mí estoy sacrificando para mantener esta estabilidad?”
Responder a esto suele dar más claridad que cualquier consejo externo.
¿Puede ayudar la terapia en este punto?
Sí. Mucho.
La terapia ayuda a:
- diferenciar miedo de deseo
- entender por qué te quedas
- revisar patrones repetidos
- tomar decisiones sin culpa ni prisa
- sostener una ruptura o una reconstrucción con más conciencia
No se trata de empujar a nadie a separarse, sino de ayudar a escucharse de verdad.
Un mensaje final
Aguantar por estabilidad puede parecer la opción más segura, pero a largo plazo, vivir desconectado de uno mismo suele pasar factura.
Afrontar una ruptura duele, pero también puede abrir espacio para una vida más coherente, más viva y más propia.
No se trata de elegir lo fácil, sino lo honesto.
¿Necesitas acompañamiento para tomar esta decisión?
Si estás atrapado/a entre quedarte por estabilidad o irte por bienestar, un espacio terapéutico puede ayudarte a ordenar lo que sientes y decidir sin culpa ni presión.
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Psicóloga online y presencial en Vecindario infantil, adolescentes, adultos y mayores
Soy María Jesús, psicóloga online y presencial en Vecindario. Acompaño a personas de todas las edades a comprender lo que sienten, recuperar su equilibrio emocional y construir una vida más plena, con herramientas psicológicas eficaces y un trato humano y cercano.
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